J Lloró Con Sentimiento

Recuerdan que en otro “post” les había mencionado que J se sienta en una silla en una esquina a hablar (aunque no habla nada) con su amigo el doctor. Pues hace par de noches que J me lleva para que yo me siente con él en la silla y me dice “mami a hablar con el doctor”. El está queriendo compartir su momento conmigo.

La primera noche me senté y J tenía a Mario en sus manos, moviéndolo en forma circular como él acostumbra, y decía algo que yo no entendía. Era una frase en ingles y tenia que ver con los días pues le entendía que al final decía “opposite day”. La cosa es que repetía esta frase una y otra vez.

Yo trataba de evitar que continuara repitiendo lo mismo y le hacia preguntas de la terapia de Tomatis y le hablaba de varias cosas. J me cambiaba el tema y me hablaba de los días de la semana. La segunda noche paso básicamente lo mismo. Repetía la frase en inglés, mientras tenia a Mario en sus manos, y yo le hacia preguntas. El me contestaba algunas pero desviaba la conversación. No dejaba que yo me parara de la silla pero tampoco me hacia caso mientras yo estaba allí.

Anoche volvió con lo mismo y yo pensé que tal vez no seria bueno seguir fomentando esta conducta. J se me acercó, él llega a cierta hora a nuestro cuarto a sentarse en su esquina, y me dijo “vamos hablar con el doctor”. Yo le dije que se sentara a mi lado, en la cama, para hablar. Demás esta decirles que se comenzó a enojar pero fue algo distinto a otras ocasiones. El comenzó como a lloriquear y me repetía, “vamos a hablar con el doctor” y yo le repetía que mami quería hablar con él no con el doctor.

Pues comenzó a halarme la ropa y yo lo ignoraba, luego trataba de morderme los dedos de los pies y lo regañé. Luego le dio con tratar de morderme la oreja, a todo esto el tenia coraje pero hacia las cosas de una forma sutil, sin gritos ni pataletas. Llegó el momento en que ya estaba portándose medio pesadito y le regañé fuerte. Gritó que NO pero continuaba halándome la ropa. Pues siguió con la haladera de mi ropa y Francisco se levantó y buscó su correa, déjenme aclararles que nunca habíamos mencionado o sacado la correa para J pero queríamos ver como él reaccionaba y si entendía el concepto de la correa.

Francisco se le paró al lado a J y hacia ruidos con la correa y se la mostraba a J. Inmediatamente J se acostó a mi lado y comenzó a llorar pero con sentimiento. Nunca J había llorado de esta forma pues cuando J tiene coraje y llora, no es llorar normal sino que grita. Pero anoche fue distinto, lloró con lágrimas y con sentimiento. Recuerdo cuando J era pequeño que esta era una de las cosas que nos estaba raro que cuando lloraba, nunca había lagrimas.

Bueno pues luego de un rato de estar llorando, se calmó y se quedó calladito. Pensamos hasta que se había dormido pero en una se movió y le dije, J vamos a tu cama. El se levantó con lo ojos cerrados, caminó con los ojos cerrados, se acostó en la cama aún con los ojos cerrado y agarró la botella y se tomó la leche todo con los ojos cerrados. Cuando terminó de tomarse la leche extendió la mano para que Francisco agarrara la botella y aún permanecía con sus ojos cerrados. Se que hizo un comentario de los ojos pues dijo algo y la ultima palabra era ojos, pero no lo entendimos.

Tal vez como realmente lloró y corrieron lagrimas, él mismo estaba sorprendido y sentía lo ojos mojados y por eso no los quería abrir.

Tal vez les suene un poco drástico de mi parte el no querer sentarme con J en su esquina pero creanme que a J hay que córtales las rutinas de raíz por que si no, me tiene todas la noches en lo mismo y no puedo fomentar sus obsesiones. Es suficiente con que él se siente, para que también me tenga a mi sentada en una esquina.

Mi gente hay mal tiempo en camino, tenemos aviso de tormenta tropical. Cuídense mucho y por favor manténganse en contacto con nosotros para saber que todos están bien. Me dejan comentarios luego que pase el mal tiempo para que se reporten y nosotros saber que ustedes, sus chicos y familias están bien. Si no blogeo mañana, saben que estamos sin luz pues para esta zona donde yo vivo, si pasa un pájaro aleteando fuerte, nos quedamos sin luz. Dios los Bendiga.