Lo Siento, Lo Siento

A Tomatis también le debemos que J ahora argumente o sea contestón, si señores así como lo leen. Anoche Francisco le explicaba a J que el viernes había que cortarle el pelo. Como diría mi hija Kimberly, J tiene un pan en esa cabeza (no me pregunten). Pues anoche J estaba con esta única actitud de llevar la contraria que en realidad hasta nos causó risa pues J antes no tenia la capacidad de establecer un argumento o dejarnos saber su sentir a menos que fuera con una santa rabieta.

Pues como les decía, Francisco le dijo a J que el viernes se iba a recortar y J inmediatamente le dijo “no, no, no” y no es que dijera esto sino que ponía su boquita en una forma que daba deseos de comérselo a besos. Luego dijo “lo siento” “lo siento”. Ahora se pasa con eso de “lo siento” si le digo que se va a bañar me dice “lo siento” “lo siento” como quien dice “no quiero”.

Luego de “discutir” un rato sobre el recorte, J se quiso ir a sentar en su esquinita y pidió que se apagara la luz. Luego que se apaga la luz hay que encender el “night light”. Le cuento una breve historia. Un día fuimos a quedarnos en casa de mi papá y pues J no duerme sin un “night light”. Por suerte mi papá tenia de estas luces y nos dio una para utilizarla con J. Luego mi papá nos la regaló para que la tuviéramos en la casa. J siempre recuerda que ese "night light" se lo regaló su abuelo pues cada vez que el quería el "night light" nos decía “luz de abuelo”. Pues ese "night light" que mi papá le regalo a J se rompió. El otro día fuimos a casa de mis suegros y ella tenía una de estas lucecitas en forma de bola de “soccer” y J se antojó de ella.

Esta es la que hemos estado utilizando pero es muy brillante y alumbra demasiado así que anoche Francisco encontró otra. Pero noooooooo J quería la de la bola y ya se podrán imaginar que se formó una al punto que Francisco tuvo que enchufar la bendita luz de la bola de “soccer” con tal de que J se acostara a dormir y tener un poco de silencio.

¡Ah! pero antes de que se acostara a dormir, J se puso a dar vueltas y vueltas. Nosotros lo observábamos y lo dejamos pues queríamos ver si J ya se marea cuando da vueltas. Esto es uno de los objetivos de la organización neurológica, se le dan unos ejercicios de estimulación vestibular para lograr que ellos sientan mareo al dar vueltas. Inclusive en Tomatis en esto días le estaban trabajando con estimulación vestibular. Pues luego de un rato, J dejó de dar vueltas y cuando se detuvo caminó hacia su silla de la esquina y se sentó. Nada de mareo mi gente y cuidado que dio vueltas, hasta yo estaba mareada de mirarlo.

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En otro tema, mi adorada hija Kimberly regresó ayer de sus merecidas vacaciones. Este año no viajó fuera de Puerto Rico pero estuvo quedándose entre las casas de sus tíos, de su abuela y de su abuelo. Cuando llegamos Kimberly y yo a la casa, inmediatamente ella fue a buscar a J. Cuando J la vio le dijo “Kimberly que tú haces”, como quien dice, donde estabas que no te había visto. Kimberly le contestó a J que ella estaba en casa de su abuelo y saben lo que J le dijo “abuelo Papiro”.

Les explico, Papiro es el apodo del abuelo paterno de J que no es el mismo abuelo paterno de Kimberly pues como ustedes saben Kristian y Kimberly son de mi matrimonio anterior. Pues nunca J, obviamente, ha entendido que sus hermanos no tenían su mismo papá. Cuando J le dijo esto a Kimberly ella le dijo “no yo estaba en la casa de mi abuelo el papá de mi papá” y saben lo que J le contestó “Papito” (este es el apodo de Francisco). Aquí Kimberly le trató de explicar pero J no entendía. Pero es asombroso pues por lo menos J hizo una relación entre que si tú eres mi hermana, por lo tanto mi papá (Papito) tiene que ser tu papá, me siguen. Más adelante cuando J tenga la capacidad de comprender esto, le explicaremos.

Kimberly nos comentaba que J está hablando mucho y ahora habla con mucho sentido, ella también notó los cambios que J ha dado gracias a Tomatis.