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Hoy he publicado dos escritos, el correspondiente al día de ayer y el de hoy. Al parecer ayer no completé correctamente el proceso de publicación por lo que no salió el escrito en el blog.
Kimberly me trae un mini reporte diario del comportamiento de J en la escuela pero por lo
menos 2 veces al mes yo voy personalmente a reunirme con la maestra para hablar sobre su progreso. Hoy fui y me reuní con la maestra y me indicó lo siguiente; me dice que J ya está más adaptado. Ya las rabietas son menos frecuentes y cuando le dan, ya acepta negociar. La maestra me indica que antes era bien inflexible y que no escuchaba razones pero ahora coopera más. También aprendió a utilizar los baños fuera de su salón, antes solo quería usar el que está dentro de su salón. Aprendió a que tiene que levantar la mano si quiera contestar o participar en la clase. Todavía hay que recordárselo pero ya no es como antes, que si no lo dejaban formaba una rabieta. Socializa con más niños y juega.Por otro lado, agrede a los niños cuando tiene coraje. Esto ocurre cuando no quieren hacer las cosas como él dice o si él quiere jugar y los niños no quieren. También si lo molestan, y la maestra me dijo que ella se lo advierte a los niños que lo dejen tranquilo. Esto del carácter es una de las cosas que se nos ha hecho difícil de trabajar, pregúntenle a Kimberly que siempre recibe sus descargas. Claro está, ha mejorado muuuuuuuucho pero hay que seguir dándole fuerte a esto.
Hace la fila en el comedor sin pelear. Antes no quería hacer fila y le daban unas rabietas si la comida estaba caliente. Yo le había explicado a la maestra de sus problemas sensoriales y que él no soporta las cosas muy calientes. Ahora la maestra, mientras J está en fila, entra y le sirve la comida primero para cuando él entre ya esté fría (¿que linda verdad?). No me puedo quejar de la maestra ella siempre ha cooperado mucho y trata muy bien a J. Prueba de esto es que casi siempre a la hora de almuerzo él está sentado con ella. Ella también es bien comprensiva pues tiene un tío y un primo autistas.
Otra observación que me hizo la maestra es que hay días en que Super J está bien dispuesto a trabajar en el salón. Hay otros en que ni toma el lápiz en sus manos y no hace nada en todo el día, estos son más frecuentes. Ella me indica lo mismo que me dice la TO y tantos otros especialistas, y que nosotros sabemos desde que era bebe, que J es bien falto de motivación y hay que estar encima de él para que haga las cosas. Esto sabemos que esa parte de sus características y estamos trabajando con ello.
Le pedí a la maestra que fuera honesta conmigo y me dijera si opina que J está preparado para el primer grado. Ella me indica que sabe que habrá un proceso de adaptación, igual que lo tuvo en Kinder, en el cual presentará problemas pues los métodos son distintos y hay cosas que hace ahora que no le serán permitidas. Una de ellas es dormir. Por otro lado, me indica que la ventaja que tiene J es que aprende rápido, capta lo que se le trata de enseñar aunque no preste atención o por lo menos así lo parezca y ha demostrado ser muy inteligente. Ella me dice que en cuanto a exámenes, la maestra de primero está dispuesta a brindarle los exámenes orales e individuales. Ya la maestra de primer grado conoce el caso de J, conoce sus comportamientos, sus fortalezas y debilidades pues ha tenido la oportunidad de observarlo. Esto me tranquiliza un poco, más aún cuando todavía no tenemos ninguna otra opción de escuelas para J. Nos sentimos aliviados al ver que estas maestras a pesar de no tener recursos, tienen la buena voluntad de ayudar a J.
Mi preocupación es que ahora que casi terminan las clases, es que J está comenzando a adaptarse y ahora vienen 2 meses en los cuales estará lejos del ambiente escolar.
4 comentarios:
Yolanda que bueno que cuentes con ellas, definitivamente esas maestras son una bendición del cielo. Y tu hija, Dios la bendiga por ese corazón tan noble y dulce! Es hermoso leer como ella cuida de su hermanito en la escuela y lo entiende tan bien.
Definitivamente, hasta ahora la maestra de J se ha portado temendamente bien. Espero que en primer grado sea igual. En cuanto a mi bella hija, realmente es maravillosa. Hay días que siento tanta pena con ella, especialmente cuando me llama desde la escuela y me dice "hay mami, J acaba de hacer una de la suyas pero ya lo dejé tranquilo en el salón". La pobre tiene que pasar muchas con él y de verdad que ella es toda una campeona pues J se puede poner muuuuuuuuuuy difícil y retante.
Hola Yoli:
Me alegra que todo vaya bien. Yo estoy ocupado con lo del juego para la autoconciencia.
He visto que J se lo pasa muy bien jugando al escondite del modo como lo cuentas. Eso es estupendo porque se comunica contigo; además está aprendiendo a suprimir su entorno mientras que él está totalmente atento a lo que sucede, con los ojos cerrados. Se trata ahora que progrese; puedes probar ahora lo siguiente: en la fase que él tiene los ojos cerrados y tú preguntas ¿dónde está J? , puedes "desaparecer"; luego apareces de golpe y juegas con él y le haces cosquillas y carantoñas. Esto cambia la estructura del juego; J tiene ahora que estar espectante mientras tiene los ojos cerrados, pues no sabe si cuando cierra los ojos tú vas a estar o no, cuando los abra. Él aprenderá que tú puedes desaparecer y que reaparecerás cuando él menos lo espere. Y que cuando aparezcas le vas a hacer cosquillas. Si el juego lo haces en otro lugar, más adelante, él tendrá ganas de huir realmente. Pues si no lo hace lo pillarás. Si en esta nueva fase no sabe esconderse, alguien puede ayudarlo a que lo haga de modo eficaz. Quizás no comprenda aún el sentido del juego del escondite. Pero es a través del mecanismo natural de la huída como puede enseñársele. Otra fase sería la de que él pueda observarte mientras lo buscas. Alguien tiene que enseñarle a observar tus evoluciones. Bien directamente mediante una observación visual desde su escondite. Bien mediante el aumento de los signos auditivos que anuncian que estás más cerca de su escondite. Su compañero de escondite le ayuda a que no se tape los ojos. La siguiente fase consiste en que aproveche la información visual de tu posición mientras los buscas. Ellos pueden cambiar ahora de escondite. Alternar los papeles de buscador y buscado, afianzan la comprensión de esa situación compleja. Mientras que hay niños que juegan al escondite porque ya han alcanzado suficiente grado de abstracción para comprender el juego, otros deben ser ayudados a jugar al escondite para alcanzar el grado de abstracción. El desarrollo de este procedimiento te permitirá hacer los ajustes necesarios para adaptarlos a las necesidades de tu niño. Esto que te recomiendo puede verse en los niños, que primero juegan al escondite, pero luego hacen otro juego, el castillo, o cosa así, donde el buscador no puede alejarse demasiado del castillo, porque si no localiza a algún niño en su escondite y éste, aprovechando que el buscador se ha alejado del castillo, en alguna dirección, y aprovechando que está de espaldas, y no puede verlo, sale corriendo hacia el castillo, y cuando llega, toca el castillo, que suele ser un árbol u otro lugar fijo, y dice ¡ me salvé! . Si el buscador llega antes al árbol el niño que corre pierde. El buscador pierde la partida y tiene que hacer otra vez de buscador. Todos los niños vuelven a esconderse. Más o menos es así. Este segundo modo de jugar al escondite profundiza en el conocimiento de los límites de la mirada del buscador y en la velocidad de la carrera como medio de ponerse a salvo. Seguro que ahí lo saben jugar los niños. Estudiando todo esto se observa el profundo sentido de los juegos populares tradicionales.
Saludos cordiales.
Hola Eduardo....en el Post de hoy cuento sobre el juego de esconder.
Saludos.
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