Me ha costado escribir este post pues tengo muchos sentimientos encontrados. El otro día me pasó algo increíble, una experiencia única, enriquecedora pero que me trajo muchos sentimientos.
A través de Facebook, he conocido un joven con Asperger. Este joven me hizo una invitación para que formara parte de sus amigos en Facebook.
La cosa es que comenzamos intercambiando mensajes por email, un día coincidimos en el chat de Facebook e intercambiamos números de nuestros celulares y pues se dio esa conversación telefónica.
Yo no quise llamarlo pues realmente no conocía si a él le gustaba hablar por teléfono o se comunica mejor por email o Chat. Yo quise respetar esto pues conozco otro joven que prefiere la comunicación escrita que personal.
El me llamó y conversamos por largo rato. Esta fue una experiencia única pues yo conozco otros jóvenes con Autismo y hemos intercambiado palabras durante reuniones o actividades de la Alianza pero nunca había tenido la oportunidad de conversar por tanto tiempo con alguien con Autismo.
Digo que fue una experiencia única pues escuchar de los propios labios de una persona con Autismo que te explique como es su vida con el Autismo, es algo impresionante.
Es un joven muy inteligente, con una capacidad increíble. Estudia música en una universidad cerca de mi pueblo, está solo por acá pues sus padres están en otra área de la isla, tiene licencia de conducir, una gran capacidad para direcciones.
El me contó sobre su vida, a la edad que fue diagnosticado (3 años), explicó como sus sentidos se han visto afectados (sensorialmente) que su fortaleza es el área visual. Que tiene problemas de movimientos involuntarios (estereotipias).
Luego vino mi pregunta ¿cuál dirías es tú major reto? A lo que me contestó, mis problemas de socialización. Aquí comenzó a decirme que a él le gusta tener amigos, que siempre busca esa interacción y sobre todo que su meta es tener algún día una novia y poder hacer su vida.
Me contó que tiene muchos problemas conservando amistades y sobre todo que cuando comienza a conocer una chica todo termina en que la chica se aleja. El dice que se pone muy ansioso y se desespera por poder conducirse bien, lucir bien ante esa chica pero que no le resulta. Que la chica percibe su desesperación y problemas y todo queda en nada.
El dice que él tiende a hablar mucho y la gente se aburre con él.
Lo impresionante es que este joven está consciente de sus problemas pero por otro lado me confesó que esto de no poder llegar a conseguir esa persona en su vida que lo acepte como es y que esté dispuesto a olvidar sus limitaciones, lo hacen sentirse deprimido y frustrado. Me quedé muda, me sentí impotente y me dolió este relato.
Me pone a pensar que uno trata con todas las fuerzas de que J progrese, llegue a ser un adulto independiente, autosuficiente y que haga su propia vida tal y como este joven lo ha logrado. Pero sobre todo nuestra meta es que J sea feliz, no importa si llega a la universidad o no, no importa si trabaja en un restaurante de comida rápida.
Ahora me pregunto, ¿qué es la felicidad para una persona con Autismo? El que este joven ha llegado tan lejos lo hace sentirse orgulloso de sí mismo y el que esté conciente de su condición y pueda hablar sobre ella también. Pero ¿será realmente feliz? Él me confesó que muchas veces se siente deprimido pues su meta es llegar a tener en su vida una compañera y no lo ha conseguido y tal vez nunca lo haga. Esta frustración es producto de su alto nivel de conciencia y de lo cerca que está a ser una persona “normal” o típica.
Esto me da vueltas en la cabeza mientras observo a J que camina desde nuestro cuarto al suyo, con Mario en la mano y hablándome ocasionalmente de un juego de Mario. Al rato llega con un juego que tiene en el PSP donde los personajes hacen unos ruidos que tengo que confesar son asquerosos, pues son eructos por la boca y por otro lado, y J se ríe a carcajadas cuando le digo “upppps ¿que fue eso? y J me contesta “no soy Yo”. O cada vez que me pasa por el lado y lo miro y le digo “te amo” y él hace ese hermoso contacto visual, su cara se ilumina con esa hermosa sonrisa, se le hacen unos hoyuelos en sus gordos cachetes y me dice “Yo te quiero” Que tal cuando se ríe a carcajadas, pues está viendo un programa en la tele, y esas carcajadas se vuelven contagiosas.
A J no le importa lo que la gente piensa de él, no le importa lo que la gente diga cuando se comporta de cierta forma rara, no le importa si está en el Tae Kwon Do y sus formas no son tan buenas como las de sus compañeros, no le importa si le cae bien o no a fulanito o fulanita, no le importan muchas cosas y por eso sonríe. ¿Por qué?, porque no está consciente de muchas cosas, no está consciente que tiene Autismo.
¿Cuál será la felicidad para J? ¿vamos nosotros llevándolo por el camino correcto para que alcance su felicidad?
Solo me pregunto……..