La Fiesta de Navidad de J

Hoy fue la fiesta de navidad de J en su escuela. Pedí el día por vacaciones para poder acompañar a J en su fiestecita. Son muy pocas las oportunidades que tengo de ir con J a actividades de las escuelas ya que siempre son en horarios que tanto Francisco como yo estamos trabajando.

La maestra le había pedido a los padres que le compraran un regalo a sus hijos y que los enviaran para colocarlos debajo del árbol de navidad del salón y se les harían entrega durante la fiesta.

Yo le había enviado el regalo a la ASE de J y ella y la maestra los escondieron en el salón. Ayer los chicos no tuvieron clases y la maestra y la ASE de J se dedicaron a decorar el salón.

Hoy cuando llegamos a la fiesta vimos el salón muy bonito con muchas decoraciones de navidad. J se sentó en su asiento pero no pasaron ni 15 minutos cuando J descubrió debajo del árbol de navidad su regalo.

El se acercó al árbol y comenzó a mirar y de repente gritó muy feliz “ese regalo dice mi nombre”. Se podrán imaginar que a partir de ese momento J comenzó a pedir su regalo. La maestra y yo le dijimos que los regalos se repartirían luego de que almorzaran que seria alrededor de las 12 del mediodía. Cuando J descubrió el regalo eran alrededor de las 10:00 a.m. A partir de ese momento estuvo velando el reloj. J es muy estricto con los horarios y yo nerviosa pues como se le dio una hora, luego si no se cumplía con ese horario J probablemente la formaría.

Mientras llegaba el momento de que se almorzara, J jugó un rato con algunos de sus compañeritos de clase. Me emocioné mucho cuando vi como sus compañeritos tratan a J. Todo era J para aquí, J para allá y los buscaban para jugar. Hasta un chico le prestó un DS y había una de las nenas que velaba por que lo dejaran jugar y no se lo quitaran.

J no comió nada de nada y cuidado que había cantidad de cosas de comer además del tradicional menú navideño puertorriqueño. Yo como ya lo conozco llevé el bultito con su botella de agua y algunas de las galletas que a él le gusta comer.

Pero si me sorprendió luego, pues cuando yo estaba comiendo le ofrecí pernil y como lo vio en hilachas lo probó. Le gustó pues el pernil además de estar en hilachas estaba blandito y como se veía blanca la carne pues yo creo que J pensó que era pollo. La cosa es que se comió todo el que yo tenía en el plato.

J no comía nada de carne pero últimamente me he dado cuenta que si la carne está en hilachas que él pueda masticarlas con facilidad, pues se las come. El otro día en casa de su abuelo también comió carne y me hicieron la misma observación, que se la comió por que ellos se la picaron en hilachas. Ellos estaban eufóricos de que por primera vez en tantos años J comiera carne en su casa.

Después de la fiesta nos fuimos a la fiesta del salón de la madrina de J para que ella lo viera. Allí no duramos mucho pues J ya se quería ir y más aún porque el regalo que le llevé para su fiesta era una película de Sponge Bob que él había estado pidiendo.

El se quería ir para la casa a ver la película y yo tenia otros planes. Estábamos planificando llevar a J este sábado a ver a Santa al Mall y que se tomara un foto con Santa. Francisco me sugirió que aprovechara y fuera hoy que no hay casi gente en el Mall pues el sábado, como ya estamos cerca de nochebuena, eso va a estar súper lleno.

Le dije a J que si quería ir a dar un paseo. J dijo que sí y nos fuimos rumbo al Mall. J de camino estaba comenzando a desesperarse pues decía “está lejos mi casa”. Yo no le dije que iríamos a ver a Santa por que no estaba segura si a esa hora y día en semana estaría Santa allí. Le pregunté a unas mamas en la fiesta que si sabían si Santa estaría a esa hora en el Mall y me dijeron que si.

Cuando llegamos entré por el área donde tienen a Santa que es una decoración muy bonita simulando el Polo Norte. Tan pronto J vio a Santa se sonrió y comenzó a cantar Jingle Bells.

Las fotos quedaron muy lindas y luego de retratarse J me dijo “podemos mirar en tiendas, solo mirar”. Yo accedí pues me sorprendió que J pidiera ir a mirar las tiendas. Pasamos por frente a la juguetería y J tímidamente me dijo “mira tienda de juguetes”. Yo le pregunté si quería entra a mirar y me dijo que si.

Una vez dentro de la tienda, J comenzó a mirar los juguetes y vio algo de Sponge Bob y me dijo “¿podemos?”. El me miró con esa carita tan dulce que me movió el corazón. Yo le dije que no podíamos comprar eso pues estaba muy caro y además ya pronto Santa viene. Yo esperaba una mega rabieta pero J solo me dijo “ok”. Seguimos caminando por la tienda y vio un muñeco de Sonic. Este es un personaje que sale con Mario Bros en unos de los juegos que salieron nuevos y que J pidió para Santa. Miré el muñeco y no costaba mucho así que le dije a J “como te has portado muy bien y no has hecho rabietas te puedo comprar a Sonic” “vez que vale la pena portarse bien”. J se puso súper contento y compramos el juguete y nos fuimos para la casa.

Tan pronto llegó se puso a ver la película de Sponge Bob y allí está muy entretenido. Por cierto, J se quiso llevar a Mario el osito para su fiesta de la escuela y se lo presentó a todo el mundo.

J se las dio de fotógrafo hoy y él mismo tomo unas fotos. Le quedaron bastante bien por ser la primera vez que agarra una cámara. Aquí les dejos algunas fotos cortesía de J.

J les presenta a Mario el osito su amigo inseparable

J me tomó esta foto

También quiso retratar a su ASE

Aquí lo retraté con su mejor amigo, Andrés